El sector industrial argentino enfrenta una crisis profunda, marcada por la pérdida de miles de empleos, una reducción en la producción y complicaciones en las negociaciones salariales.
Pérdida de empleo y cierre de empresas
Entre noviembre de 2023 y agosto de 2024, el sector industrial sufrió una pérdida de 38.532 puestos de trabajo. Al incluir minería y construcción, la cifra asciende a 126.050, según la Superintendencia de Riesgos del Trabajo (SRT). Además, 879 empresas del sector manufacturero cerraron sus puertas, alcanzando un total de 2.333 al sumar los otros rubros.
Estos datos, analizados por la Confederación de Sindicatos Industriales de la República Argentina (CSIRA) y el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), reflejan el deterioro generalizado de un sector que emplea a 1.660.000 trabajadores.
Caída de la producción y el uso de la capacidad instalada
El panorama productivo también muestra señales alarmantes:
- El 92% de los sindicatos informó que el uso de la capacidad instalada se mantiene estancado o ha empeorado desde el inicio de la actual gestión.
- Más del 60% reporta menos horas de trabajo disponibles.
- El 76% indica una retracción en la producción, que se traduce en una reducción de turnos laborales en el 62,9% de las fábricas.
Impacto en las condiciones laborales
El impacto de esta crisis afecta directamente a los trabajadores:
- En el último trimestre, el 60% de los sindicatos reportó despidos.
- El 82% menciona recortes de horas extra, y el 72% señaló suspensiones, licencias anticipadas y adelanto de vacaciones.
- Sólo el 3,4% de los gremios percibe mejoras en las condiciones laborales, mientras que el 34,5% asegura que han empeorado.
En cuanto a las paritarias, el 80% de los representantes sindicales denuncia retrasos en las homologaciones y los pagos, generando incertidumbre para los trabajadores.
Expectativas a futuro y el impacto de la Ley Bases
De cara al próximo trimestre, las perspectivas son desalentadoras:
- Sólo el 7% de los gremios espera una mejora en el panorama industrial.
- El 93% cree que la situación permanecerá igual o empeorará.
- El 70% de los referentes sindicales anticipa un impacto negativo en el sector debido a la implementación de la Ley Bases, señalando que podría agravar la ya frágil situación de la producción y el empleo.
La crisis del sector industrial argentino no sólo se refleja en números, sino también en el impacto directo sobre las condiciones laborales y las expectativas de quienes dependen de esta actividad. La caída sostenida en la producción y la falta de medidas efectivas para frenar los despidos y cierres empresariales representan un desafío urgente para la política económica del país.