Martín Villarreal, una persona maravillosa.

La columna de Iván Ferreyra

Me encanta hablar con él, me cuenta de Rogelio un amigo en común, al que trajo a ver los galpones pintados y hablar de los viejos tiempos. En épocas de escasez de ejemplos, de modelos de luchadores, está Martín, ocupando espacios indispensables en la historia de Canals, en el camino al progreso, que él y muchos de su generación soñaron.

Si uno es los amigos, a él lo quieren todos, ponen las manos en el fuego por él. Sé que estas palabras quizás no alcancen para describir la calidad de persona, pero que esto sirva como un punto de partida, y seguramente esta historia seguirá escribiéndose por mucho tiempo. Hoy después del partido de básquet de Argentina, un jugador dijo: “Caerse está permitido, levantarse es obligatorio. 

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