El hecho ocurrió el pasado domingo, y trascendió en la mañana de este martes.
Según la denuncia realizada, el médico habría entrado a la fábrica de su vecina con una escopeta y, tras amenazar al guardia, mató al animal. También habría intentado atentar contra otros dos canes.
Raúl Andrés Leguizamón, director del hospital de la localidad de Villa del Rosario, fue imputado por “coacción calificada y daño” y está siendo investigado tras asesinar a uno de los perros que vivían en la fábrica ubicada al lado de su casa de campo. Ocurrió el pasado domingo en la localidad cordobesa de Laguna Larga.
Carolina Carrasquera, dueña de la empresa COR-VIAL SA, fue quien denunció al médico y lo escrachó en las redes sociales. La mujer compartió a El Doce fotos y videos que muestran el ataque de Leguizamón, que utilizó una escopeta/fusil y también intentó dañar a otros dos perros. Además, al parecer también amenazó al guardia de seguridad para meterse al predio.
“Estamos consternados. Entró como loco a la fábrica y amenazó al guardia con la escopeta. Mató a un perro y después daba vueltas para matar a los otros dos. El perro es un animal, él es un hombre y profesional que se cree el dueño del pueblo”, afirmó la denunciante en diálogo con El Show del Lagarto.
Lo admitió y se defendió
“Mi casa queda a unos 1.200 metros de la fábrica. Esta fue la tercera oportunidad en la que los mismos perros, de los mismos dueños, de la misma fábrica me hacen daño”, dijo el médico a Cadena 3.
“La primera vez me habían matado un potrillo encerrado en corral. Hable con ellos y me dijeron que no iba a volver a suceder. La segunda vez me mataron dos ciervos. El domingo llegamos al predio y me encuentro con la triste realidad de que me estaban matando cuatro ovejas e hiriendo a las otras”, contó.
Según su relato, en ese momento corrió a tomar un arma. “Mis hijos y un amiguito de ellos gritaban para que los perros salieran del corral y no mataran a todas las ovejas”, prosiguió.
“En ese momento se dio vuelta el Rottweiler, un perro de unos 60 kilos, pasó por debajo del corral y nos encaró a nosotros. Ahí abrí fuego, para defenderme y defender a los que venían conmigo”, aseveró.
Leguizamón aseguró que todo pasó en su terreno. “Los perros vinieron a mi campo. Todo lo que pasó, pasó en mi predio. Yo me defendí. Las víctimas somos nosotros”, dijo.
“Me han matado un potrillo, un ciervo y ocho ovejas. No me mató las otras porque llegué en el momento justo”, remarcó, al tiempo que reconoció que asesinó al can en represalia por la pérdida de sus animales.
“Yo tengo perros, los quiero y respeto a toda la gente que tiene perros. Pero si alguien va a tener un animal malo como un Pitbull, un Dogo, un Presa Canario o cualquier perro de ataque, deben tomar los recaudos necesarios”, opinó.
Consultado respecto a si se arrepentía de su accionar, el médico dijo: “Me arrepiento de haberme llegado hasta la fábrica, fue una emoción violenta. De lo que no me arrepiento es de haber defendido mi propiedad, mis animales, mi familia y mi integridad del ataque de esos animales”. “Hoy me mataron las ovejas, si mataban un chico iba a ser peor”, finalizó.
Una de las cámaras de seguridad de la empresa COR-VIAL S.A. muestra cómo el guardia de seguridad (29) levantó las manos rogando no ser atacado al ver al hombre armado que lo amenazaba. El médico llegó con su rifle a bordo de un cuatriciclo.
El comisario Diego Matías, jefe de la dependencia de Laguna Larga, confirmó que la fiscalía de instrucción de Río Segundo ya comenzó la investigación. La casa del director del hospital de Villa del Rosario fue allanada y allí se secuestraron varias armas de fuego.
“Actuó con total impunidad. Este hombre es capaz de cualquier cosa, es una vergüenza, se siente poderoso, que todo lo maneja con dinero, no puedo entender cómo está en ese cargo”, escribió la denunciante en su perfil de Facebook.